Un estudio sobre el viñedo de Los Pedroches revisa su historia y las posibilidades de recuperación del cultivo que existen como elemento del paisaje cultural de la comarca. El documento, articulado en dos áreas temáticas, comienza con un análisis de la historia de este aprovechamiento agrario desde la época prerromana hasta su desaparición casi total en la comarca a principios del siglo XX y concluye con los resultados de las prospecciones y del trabajo de campo que han llevado al descubrimiento de lo que podrían ser variedades locales con perfiles genéticos únicos.
Con el título ‘Estudio sobre el viñedo de Los Pedroches: caracterización y perspectivas de futuro’, la redacción de este trabajo, obra del historiador y periodista Francisco Javier Domínguez, ha sido promovida por la Asociación Adroches y por el Instituto Provincial de Desarrollo Económico de Córdoba (Iprodeco) y tiene como objetivo avanzar en el proceso de recuperación del cultivo como elemento del paisaje cultural de la comarca en el pasado y que hoy está prácticamente desaparecido.
El autor de la investigación, que se puede consultar en la página web de Adroches, ha explicado que es sorprendente la evolución que sigue la viticultura en la comarca, sobre todo en los siglos XVI, XVII y XVIII, cuando tuvo un importante esplendor en cuanto a extensión y a importancia del cultivo como elemento, sobre todo, de autoconsumo. Sin embargo, durante el siglo XIX, se apuesta por el olivar y por otras formas de explotación de la tierra y a principios del siglo XX, la filoxera arrasa con las plantaciones que quedaban. Excepto en el caso de la zona Hinojosa-Belalcázar, donde el cultivo se recupera y se mantiene, aunque de forma marginal, el viñedo desaparece completamente en Los Pedroches.
Francisco Javier Domínguez ha realizado más de 100 prospecciones, sobre todo en el núcleo central de la comarca, con una metodología que ha sumado investigación histórica y trabajo de campo. Tras este proceso, las 37 muestras obtenidas han sido sometidas a análisis genético por parte de la Universidad Pública de Navarra, de las que han resultado nueve perfiles de variedades que pueden ser locales y autóctonas, algunas de ellas con repeticiones en vides situadas a 30 kilómetros de distancia, lo que indica una intencionalidad en la plantación. De todo este proceso se da cuenta en un informe que, según su autor, “está vivo” porque se seguirá investigando y enriqueciendo este documento.
El presidente de Adroches, Santiago Ruiz, ha expresado que “estamos ante la posibilidad de recuperar una cultura perdida hace un siglo pero que tuvo una gran importancia en la economía de la comarca”. También ha afirmado que “aunque somos conscientes de las limitaciones legales que tiene este cultivo, potenciar que se vayan plantando pequeñas viñas en el entorno de los municipios puede contribuir a poner en valor el viñedo como paisaje cultural”. Ruiz ha añadido que “sería una forma de hacer viables muchas parcelas que no pueden tener otros usos y que podrían albergar viñedos de autoconsumo e incluso, si se cumplen los requisitos, consolidarse como una actividad agrícola más”.
Más de 3.000 hectáreas de viñedo en el pasado
La comarca de Los Pedroches, según se expresa en el estudio, contó con más de 3.000 hectáreas de viñedo en su momento de mayor esplendor. La recuperación de variedades locales, que se acometerá en colaboración con el IFAPA de Cabra, podría ser una de las claves para recuperación progresiva del viñedo en la comarca. Sin embargo, Domínguez asegura que “estamos ante un proceso muy lento que debemos planificar y acometer con paciencia porque en el mundo del viñedo los procesos son lentos y están muy regulados”. Sí sería posible ir desarrollando plantaciones de autoconsumo que contribuyeran a diversificar el paisaje de la comarca, sobre todo en zonas de sierra, para después ir acometiendo plantaciones reguladas y con objetivos productivos.
El próximo sábado 22 de mayo, un grupo de expertos, profesionales y aficionados al cultivo de la vid de la comarca se dará cita en la finca experimental Fuente de la Calera, ubicada en el término de Alcaracejos, para debatir sobre las perspectivas de futuro del viñedo en la comarca y su posible recuperación.
