Vivimos en una época donde las iniciativas de respeto, cuidado y protección del medio ambiente y el territorio son más necesarias que nunca. Si analizamos la geografía española son muchas propuestas las que están en marcha y, en Ruralpedia, vamos a fijarnos en muchas de ellas. Sin duda alguna, las más imprescindibles puede que sean aquellas que ponen el valor de la tierra en contacto con los más pequeños.
Si los niños y niñas son el futuro de este país y, por supuesto, de nuestras zonas rurales, es fundamental que conozcan su tierra, los problemas que enfrentan y aprendan a poner soluciones para solucionarlos. Aquí llegamos a El Dehesafío, una iniciativa que impulsa Fundación Prode, con la colaboración de Covap y el Ayuntamiento de Pozoblanco, en el norte de la provincia de Córdoba, en plena comarca de Los Pedroches, y que pretende poner en valor un tesoro natural como es la dehesa y llevar a los colegios que su protección, cuidado y regeneración es fundamental para asegurar el futuro de su comarca.
Queríamos conocer mucho más sobre este proyecto y hemos hablado con Jesús Carrasco, técnico de El Dehesafío, que nos ha contado muchos detalles sobre cómo trabajan con los pequeños sobre un ecosistema único en el mundo como es la dehesa.
Así ha sido la charla:
Ruralpedia: Ya son varios cursos poniendo en marcha El Dehesafío en Los Pedroches y trabajando con niños y niñas de la comarca de Los Pedroches en un proyecto tan importante para el futuro, ¿qué valoración hace?
Jesús Carrasco: Personalmente, como técnico educativo del proyecto, mi percepción es positiva y ascendente, los datos están ahí, cada año abarcamos más centros educativos, más alumnos, plantamos más encinas e involucramos a mayor número de personas con discapacidad en el proyecto, por tanto, en términos generales tenemos una valoración muy positiva de este proyecto.
R: ¿En qué consiste el trabajo con los más pequeños dentro de El Dehesafío?
JC: Principalmente en la divulgación de los valores que nos aporta nuestra tierra. Intentamos que los chicos y chicas de nuestro valle tengan conciencia del tesoro que tenemos aquí, que sepan la situación en la que se encuentran, cómo se gestiona y maneja el campo con el paso de año agrario y por último que conozcan la biodiversidad que podemos encontrar en la dehesa que, aunque no lo parezca, hay mucha. La Dehesa es un ecosistema único en el mundo y nuestra tarea principal es asomar a los escolares a ese entorno y que lo valoren como se merece.
Por supuesto, el proyecto al ser parte de la Fundación PRODE, la inserción de las personas con discapacidad en él es algo primordial. Buscamos que estas personas sientan el proyecto como suyo y formen parte activa de este en funciones de siembra, riego, mantenimiento de encinas y también ayudando en las sesiones en los centros educativos.
R: ¿Cuál es la respuesta que suelen dar los niños? ¿Conocían bien la dehesa que los rodea?
JC: En general es buena, es decir, los escolares, dependiendo de las edades, tienen su propia conciencia y visión del campo, de nuestro campo. Si no conocen ciertas cosas las han visto en su campo porque la mayoría tiene campo, animales… Por tanto, los escolares de Los Pedroches tienen ciertas nociones y conceptos adquiridos antes de comenzar con El Dehesafío. Como anécdota… En una de las sesiones siempre hago una pregunta a los chicos; “¿Quién de vosotros tiene algún familiar que trabaje en el campo?” La gran mayoría levantan la mano. Esta pregunta la hago para que vean la importancia que tiene la Dehesa en nuestras vidas, en Los Pedroches.
R: Nos gusta mucho conocer los datos en los que se mueve un proyecto como El Dehesafío. ¿Con cuántos niños se ha trabajado y qué perspectivas de futuro tiene en los próximos cursos?
JC: El número de alumnos y alumnas que están participando año a año en el proyecto va ascendiendo positivamente. Como decía en la primera pregunta, cada vez damos cobertura a más centros, más alumnos y plantamos más encinas. Para situarnos en cifras, desde el curso 2016/2017 que toma forma este proyecto de la mano de Fran Escribano y Famidis, estuvimos presentes en 9 Centros con 270 alumnos y 225 encinas. En 2017/2018 una vez que la Fundación PRODE se hace cargo del proyecto, participaron 13 Centros educativos del valle de Los Pedroches, con 575 alumnos y 375 encinas plantadas. En 2018/2019 Estuvimos presentes en 17 centros con 750 escolares y 500 encinas.
Para este curso 2019/2020 aún estamos captando los colegios que van a participar, pero las previsiones son buenas de momento.
R: Empieza a ser habitual ver como son los más jóvenes los que empiezan a preocuparse por el futuro del planeta, de hecho, en la actualidad, lo estamos viendo casi a diario en primera plana en los medios. Con El Dehesafío en marcha, ¿siente una mayor preocupación de los niños por el futuro de la dehesa y de su tierra?
JC: Por supuesto, es una cosa que veo con el trascurso de las sesiones del Dehesafío. Muchos me preguntan por pautas para cuidar el planeta, saben lo que es el reciclaje desde temprana edad, etc. Otros me exponen directamente sus preocupaciones en su campo y como las resuelven, algunas muy graciosas e ingeniosas, por cierto. Todo esto da pie a un compromiso, un compromiso que entre lo que ven en el proyecto, lo que trabajan en casa y lo que experimentan en sus campos, hace que tome forma una preocupación por el medio ambiente en general y la dehesa en particular.

R: ¿Cuál diría que es el principal compromiso que se busca en los pequeños que participan en El Dehesafío? ¿Se está consiguiendo una implicación que puede ser clave para el futuro de la dehesa?
JC: El principal objetivo en el aspecto educativo es que los niños y niñas de nuestra comarca sean conscientes de lo que tenemos aquí. Tenemos la dehesa más grande del mundo y eso, los escolares, deben tenerlo en la cabeza. Que valoren nuestro ecosistema, único en el mundo, cuáles son los problemas que amenazan nuestro entorno y cómo podemos ponerles solución a ellos.
Muchas veces cuando vamos a otros lugares de España o el extranjero nos maravillamos con los paisajes que encontramos, sin embargo, lo que tenemos en casa, como estamos acostumbrados a verlo, no lo valoramos. Ese es el punto clave del Proyecto, que los escolares vean el tesoro que tenemos entre manos y lo valoren como tal y eso creemos que lo estamos consiguiendo, aunque se trata de una carrera de fondo. Es pronto para ver los resultados, aunque sabiendo que nuestro valle vive directa o indirectamente de la dehesa, veremos esos resultados con el tiempo.
R: Recientemente estamos viendo muchas iniciativas relacionadas con la ducha contra la deforestación en nuestro país, pero la educación debería ser un paso previo fundamental para concienciar, por encima de todo a las nuevas generaciones. ¿De qué manera trabaja El Dehesafío para que los más pequeños se conciencien del problema que puede derivarse de la desaparición de la dehesa en una zona como Los Pedroches?
JC: En las sesiones, vamos encauzando a los chicos y chicas a una reflexión que muchas veces ellos mismos exponen y es que si no cuidamos nuestras encinas, nos vamos a quedar sin vegetación en la dehesa y los problemas que eso conlleva. En una de las sesiones, una de las cosas que les mostramos, es el lento crecimiento de una encina y se quedan asombrados al ver todo el tiempo que tiene que pasar hasta volver a tener árboles como los que tenemos en la Dehesa y en ese momento, los chicos quieren ponerse manos a la obra para empezar a regenerar la dehesa.
R: Ustedes, como docentes, también juegan un papel importante en el desarrollo de un proyecto como El Dehesafío. Está claro que es necesario creer en algo así para poder explicárselo a los pequeños, ¿no? ¿De qué manera trata de mostrarles El Dehesafío cuando llegan nuevos niños y niñas al proyecto?
JC: Por supuesto, es importantísimo para llevar a cabo las sesiones en el ámbito educativo. Creer en lo que haces, es clave para transmitirlo a los demás. Cada día aprendemos algo relacionado con la dehesa, cuando hablamos con los propietarios de las fincas, sus problemas, formas de plantación de las encinas, movimiento del ganado, etc. Eso hace que te enriquezcas de dehesa y sientas más tu tierra y el proyecto.
En cuanto a los chicos y chicas que llegan al proyecto, que es prácticamente nuevo cada curso escolar, tratamos de mostrarle los conceptos de la manera más directa y concisa posible para que se queden con ellos y sea algo que no se le olviden ya que les va a acompañar durante el resto de su vida si sus vidas están ligadas a este valle.
R: Trabajando con los pequeños siempre surgen momentos únicos. Y con más razón dentro de un proyecto que para ellos supone una experiencia única, lejos de las aulas, saliendo al campo… ¿hay alguna anécdota que jamás podrá olvidar de El Dehesafío?
JC: ¡Puff! Afloran millones de anécdotas graciosas e ingeniosas de los chicos. Cada uno te cuenta lo que tiene en el campo, animales, plantas, lo que hace con ellos, etc. Sería complicado quedarse solo con un momento, pero principalmente sería la sesión de plantación de encinas que hacemos, ya que es la sesión en la que los chicos viven la dehesa en todos los sentidos y se ven envueltos en ella, parece que no pero ahí los chavales sienten más su tierra y la misión que tiene este proyecto y por supuesto, en esos momentos, aparecen más anécdotas muy entretenidas y entrañables.
R: Por último, ¿cuál es el camino para inculcar a los niños el respeto por el entorno? ¿Existe una manera de hacerle saber que hay que cuidar lo que nos ha sido legado en la naturaleza y, en casos como la dehesa, echar una mano para plantar nuevas encinas que permitan que exista un futuro?

JC: Pienso que el camino es este, esto hay que hacerlo, podrá hacerse de una manera u otra, pero la divulgación de los valores de la dehesa en una zona como la nuestra es necesaria hacerla. El Dehesafío es lo que intente año a año llegando cada año a más centros y más alumnado. Tenemos la misión de regenerar la dehesa, de cuidarla y de mantenerla.
Habrá muchas maneras de transmitirles los valores que nos aporta la dehesa en nuestras vidas, eso seguro. En nuestro caso, hay que tener en cuenta que el equipo que formamos este proyecto, somos de la tierra, del valle de Los Pedroches, y eso hace que podamos transmitir con mayor compromiso todo lo relacionado con nuestro entorno. ¿Cómo lo hacemos? De una manera muy simple, a través de una parte teórica y otra puramente práctica. En el Dehesafío buscamos que los chicos sientan y conozcan todo lo que les rodea de primera mano. Desde ahí, muchas veces son ellos mismos lo que van al campo y lo miran desde otra óptica. Ese es el principal objetivo de todo esto, que sientan su tierra y el esfuerzo que cuesta mantenerla.